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Kitetrip Brasil
Te contamos como fue nuestro viaje de kitesurf a Brasil en grupo. Es un paraíso, y no puedo evitar volver allí ¡cada año!
Datos objetivos sobre el spot
- Mes del viaje realizado: Octubre
- Días con viento:10/10
- Intensidad viento: 20-30 nudos
- Cometas utilizadas: 10-7
- Tabla utilizada: Twin tip y tabla de olas
- Mi peso: 82 kg
- Temperatura del agua: 26ºC
- Neopreno: Olvida el neopreno, una licra para el sol el suficiente.
- Tipo de agua: Olas en mar y agua plana en lagunas.
- Precauciones: Son spots muy seguros, la única precaución quizás, es que con marea baja, al hacer downwind, hay que tener cuidado de tocar con alguna roquilla, según las zonas.
Mi experiencia
Llevo muchos años viajando a Brasil, y este es el primer año que lo hago con MareaSurf, que me ha pedido que cuente mi experiencia, pues aquí va:
¿Por qué me gusta tanto Brasil?
Lo primero, es que estadísticas de viento son insuperables de septiembre a diciembre. Podríamos decir que el viento está casi garantizado. Además, el Nordés de Brasil ofrece unos escenarios increíblemente hermosos, playas interminables, ríos y lagunas tropicales y una gente súper amable y respetuosa.
Además es de los pocos lugares en que puedes navegar en downwind, con olas, y viento totalmente side. Los downwind son lo más atractivo en mi opinión, miles de kilómetros de costa navegable los hacen posible.
El viento es del Este pudiendo variar unos grados al nordeste o suroeste. La intensidad va aumentando a medida que subimos desde Cumbuco hacia Jericoacoara, yendo desde los 18 nudos hasta los 35. La medida más utilizada en es la 9 o 10 aunque es más que recomendable llevar una 12 para Cumbuco y una 7 para Preá y Jeri. Un juego perfecto sería 12, 9 y 7 o también serviría 10 y 7. Si navegas en strapless la 12 sería la más descartable a la hora de hacer la maleta y tomar decisiones obligadas por el peso!
Decidimos volar con KLM / AirFrance ya que estas aerolíneas permiten facturar el boardbag sustituyendo la maleta incluida en la franquicia.
Itinerario: de Cumbuco a Jeri
DIA 1
Llegamos al aeropuerto de Fortaleza pasadas las 17h hora local. Vamos cansados del viaje pero con la adrenalina a flor de piel, por fin estábamos en BRASIL. Allí nos esperaba nuestro contacto para meter todo en el autobús y llevarnos a nuestro primer destino, Taíba.
El trayecto en autobús duró una hora y media más o menos y fue toda una fiesta con música, luces de discoteca y mucho licor jejejeje. Llegamos a nuestro primer destino tras dejar la carretera y recorrer varios kms por increíbles pistas de tierra y arena. Allí nos esperaba un staff muy majo, al frente del cual estaba la incombustible Gina. Cenamos unas langostas a la parrilla con arroz y guarnición y carnes varias para los alérgicos al marisco!
DIA 2
Nos despertamos temprano para desayunar. El día es perfecto, viento, sol y una luz increíble. Hay dos posible spots, uno justo frente al hotel con olas y side shore de la derecha y a escasos 700m la “Lagoa Da Barra” una preciosa laguna de mar completamente plano y poca profundidad, perfecta para aprender y el paraíso de los freestylers. De hecho los tres días que navegamos allí había un montón de pros entrenando para el campeonato de mundo que se celebraría en Cumbuco pocos días después.
DIA 3
Al día siguiente navegamos primero en al Lagoa ayudando a los novatos y después los más avanzados nos fuimos a hacer downwind hasta Paracurú donde comimos estupendamente en un chiringuito a pie de playa. Regresamos en buggies a Taiba por la tarde después de una buena sesión de kite in situ. De noche organizamos una fiesta con barbacoa y concierto de un grupo local. Caipirinha y forró!!!! Super buen rollo con todo el grupo, estuvo muy animado.
DIA 4
El último día en Taíba más de lo mismo, los que ya sabemos ayudando a los novatos y el instructor de MareaSurf, Juan Latorre, dando clase a los nobeles.
Por la tarde sesión de olas frente a la Pousada. Llegamos ciñendo hasta la playa de Taiba donde están las escuelas de surf. Allí el viento es un poquito offshore lo que provoca muy buenas olas para surf kite, aunque de menor tamaño que frente a la pousada. A última hora de la tarde nos recogió el autobús para llevarnos a Jericoacoara, no sin ciertos problemas, ya que el chofer se equivocó de camino y el bus se enterró en la arena. Cosas que pasan en Brasil!!!! Finalmente resolvimos el problema llamando a una enorme grúa municipal usada para estos menesteres que nos sacó del problema por 300 Reais. Llegamos al final de la carretera y tuvimos que cambiarnos, en el llamado intercambiador, del autobús a vehículos todoterreno, ya que para llegar a Jeri hay que atravesar unos 20km de dunas y pequeñas lagunas. Llegamos de noche a nuestro hotel en Jeri, no sin antes haber tenido ciertos “problemillas” con uno de nuestros pickups que llegó hasta nuestro destino a trancas y barrancas.
DIA 5
Nos despertamos en Jericoacora y nos pasaron a recoger por el hotel en un par de pick ups, ya que en la playa de Jeri no entra el viento, y hay que desplazarse mínimo hasta pasada la duna Por du Sol, unos 5 minutos en coche.
Estas grandes pick ups todo terrenos tenían sitio para unas 11. Otra opción es coger buggies, que quizás allí es más típico, pero salía mucho más caro. Cargamos fruta y agua abundante, los equipos en la baca y en el equipo de música reggae a todo volumen y partimos hacia el oeste con destino a la desebocadura del río Guriú. Los novatos irían hasta allí en el todo terreno y los avanzados navegando en downwind. Cuando llegamos en coche a la duna Por du Sol, nos dividimos, y los “avanzados” montamos y nos fuimos navegando hasta Guriú, donde habíamos establecido nuestra base de operaciones. Guriú es un spot situado en el delta del río del mismo nombre. Un buen lugar para iniciación y freestyle con agua plato y poco profunda, eso si un poco saturado de kiters. Fuera en mar abierto hay zonas con olas surfeables. Al regreso alucinamos con la forma “artesanal” para cruzar los todoterrenos por los ríos en una pequeña plataforma como las lanchas de las películas del oeste. De noche cenita en Jeri y luego los más noctámbulos se fueron a tomar unas copitas a las discotecas locales.
DIA 6
Volvemos a despertarnos con un día espléndido, Sol y mucha luz. Volvimos a embarcarnos en los todoterrenos hacia Guriú, unos navegando desde la duna y otros en coche. Desde allí un grupo de nosotros nos quedamos ayudando a los novatos y otro grupo continuó downwind hasta Tatajuba, unos 12 km más hacia el oeste. Comimos un pescado a la parrilla delicioso en una de las barracas a pié de playa. Anocheciendo volvimos a Jeri.
DIA 7
Amaneció un poco nublado y con menos viento. Era el día de nuestra partida hacia Cumbuco así que decidimos ir a conocer Preá y volver haciendo downwind. Cargamos todo en el todo en los pickups y nos fuimos hasta Preá. Allí montamos delante del famoso Rancho do Peixe. Los novatos aquí no tuvieron opción de navegar ya que son aguas profundas y con bastantes obstáculos. Hicimos downwind desde Rancho do Peixe hasta “A Placa” llegando casi hasta el final de playa pero no pudimos continuar hasta Jeri ya que hay que doblar un cabo, A Pedra Furada, donde hay desvente y con tan poco viento no era seguro. Al terminar volvimos al hotel y desde allí nos llevaron hasta el famoso intercambiador, donde nos esperaba el autobús que nos llevaría a la etapa final de nuestro viaje, Cumbuco. Llegamos allí bastante cansados y famélicos de noche cerrada, buscamos el primer restaurante que vimos para cenar y a dormir.
DIA 8
La Pousada de Cumbuco estaba en un lugar maravilloso y completamente abierta a la playa. Hay club de kite con aire para hinchar, manguera con agua para endulzar, piscina y lo más importante, chiringuito a pie de playa.
Delante de la pousada había una ola orillera muy molesta para los novatos así que algunos nos fuimos a la laguna de Cauipé para echarles un cabo. Unos fueron navegando en downwind y los aprendices en buggies. Otros se quedaron navegando delante de la Pousada. Tras el kite nos tomamos unas caipirinhas en el pool bar del hotel para ir calentando y luego nos fuimos al centro a cenar y tomar una copita a los pubs del centro.
DIA 9
Decidimos cambiar de lagoa y nos fuimos de aventura a conocer la Lagoa de Tabuba. Nos fuimos con el arnés puesto y el equipo en la mano en el bus urbano, toda una aventura brasileña. Llegamos allí temprano por lo que disponíamos de toda la laguna para nosotros solitos. Allí por fin vimos los primeros largos de nuestros compañeros novatos, todo estaba saliendo a la perfección!!! Después, un grupito decidimos volver a la Pousada haciendo Downwind, un mix de gente con nivel avanzado, y otros que llevaban poco navegando. Delante de la laguna había unas olas no aptas para todos. A algunos les costó un poco pasar la rompiente, ya que el viento aquí es un poquito side-onshore y hay unas buenas olas orilleras. Finalmente salimos todos y llegamos a la pousada “casi todos” ya que para alguno eran sus primeros downwinds y no conseguían avanzar. Sin mayor problema los sacamos por la playa y se fueron en buggie hasta la pousada. De noche probamos a cenar en los puestos ambulantes que hay en la calle principal de Cumbuco. La verdad es que cenamos maravillosamente y por un precio que en Europa parecería de broma. Los más “profesionales” se marcaron unos bailes y unas copas en los locales de música.
DIA 10
Nos encantó Tabuba y su laguna así que descalzos y con el arnés puesto volvimos a coger el bus urbano temprano en la mañana para volver allí. Estuvimos un par de horitas con los amidos aprendices y después repetimos downwind hasta la pousada. Es un recorrido muy ameno y en algunas zonas hay buenas olas para surf kite. En la zona central de Cumbuco demasiado tráfico. Otra noche de cenita y alguna copa de despedida.
DIA 11
Y llegó el fatídico día de la despedida, como te voy a echar de menos cuando vuelva a Galicia a navegar con neopreno de 5mm, gorro, guantes y escarpines! Hoy no habrá kite. Aprovechamos la mañana para limpiar equipos y hacer las últimas compras. Después de comer el autobús nos esperaba en la puerta de la pousada destino aeropuerto. Nuestro vuelo sale puntual destino Madrid.
DIA 12
Hacemos una larga parada en Amsterdam que aprovechamos para hacer un poco de turismo y almorzar. Llegamos a Madrid y cada uno a su casa. A nosotros nos quedaban todavía seis horas de coche por delante hasta La Coruña.
Me ha encantado este viaje a Brasil con MareaSurf. El próximo año seguro repetiré con ellos. Cuando he viajado sólo he tenido más flexibilidad, pero el buen rollo de este grupo, y la sensación de estar acompañado siempre con el instructor transmite mucha confianza, para meterme en zonas donde quizás otros años, por ir sólo no lo hubiese hecho.
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